Neikō desarrolla como consultoría en fase de proyecto una estructura compuesta por un sistema de pórticos metálicos, a modo de estructura principal, sobre la que se disponen forjados de losa colaborante. Manteniendo los muros de piedra exteriores de la vivienda y las cerchas de madera de cubierta.

Mediante la estructura metálica logra crearse un espacio diáfano en planta lo cual permite maximizar el aprovechamiento de la planta baja como local comercial y de las plantas primera y bajo cubierta como vivienda.

La complejidad de esta obra radica en el hecho de tener que mantener la cubierta en todo momento, desarrollando un sistema constructivo que permite la sustitución progresiva planta a planta de la estructura existente, apoyándola sobre los nuevos pilares metálicos y permitiendo conservar las cerchas de madera de la cubierta que no son desmontadas en ningún momento durante la ejecución.

A mayores, todo el sistema de uniones de la estructura está pensado para poder colocar la perfilería metálica en su sitio a través de las aperturas de los muros en planta baja, con la limitación en dimensiones que eso supone.